martes, 10 de mayo de 2011

Romance interplanetario


En el disco de cubierto de oro que acompaña a la sonda Voyager, viaja el electroencefalograma de una mujer enamorada.

Dice Ann Druyan:

“El 1 de junio de 1977, Carl y yo mantuvimos una maravillosa e importante conversación telefónica", recuerda. Sin que hubiese una cita o siquiera un solo momento romántico previo, los dos se habían enamorado durante los alocados apurones por terminar el Disco de Oro. "Decidimos casarnos. Para ambos, fue simplemente un momento de esos en los que se exclama: ¡Eureka! —la idea de que podríamos haber hallado la pareja perfecta. Fue un descubrimiento que se ha reafirmado de incontables maneras desde entonces-".”

"Mis sentimientos de mujer de 27 años, locamente enamorada, están en ese disco", dice Druyan. "Es para siempre. Será verdadero dentro de 100 millones de años. Para mí, las sondas Voyager son una especie de alegría tan poderosa que me aleja del miedo a morir".

EEG de A. Druyan registrado el 3 de junio de 1977.



De:

http://ciencia.nasa.gov/ciencias-especiales/28apr_voyager2/

2 comentarios:

Albert C. dijo...

eren ten bons...

Toni dijo...

Una època daurada... tenien una il·lusionada esperança. No s'ha de perdre.