Haga que sus camisetas heavys compradas en ferias y mercadillos adquieran otro estatus. Atrévase a lucir esa iconografía demoníaca tan propia del románico de hace algo menos de un milenio, presentada como un gusto por una estética sobria y profunda. ¡No sea un simple niñato macabro, aspire a la sensibilidad artístico-histórica-cuasímística!
El Bosco o Brueghel el Viejo, esos sí habrían hecho unas camisetas dabuten, que molan un mazo, ¡tronco ke kamisecarras que hubieran hecho los kolegas! (adjú! Adjú!).
Bueno... hecho el necesario preámbulo chorras, para captar su atención, aquí algunos encuentros interesantes sobre el tema:
Detalles de la Puerta del Juicio, de la Catedral que tiene una Puerta del Juicio (¿Qué sería de nosotros sin las definiciones circulares?):
Y un par de libros en Google Books, sobre iconografía demoníaca en el románico.
No hay comentarios:
Publicar un comentario