Curiosa captura de un sujeto siendo arrebatado a las alturas.
El bienaventurado no hizo caso al cartel, que severo advertía:
No ensimismarse. Peligro de arrebatamiento.
(Tras ver este prodigio, me dejé vencer por el asombro, y empecé a notar una vaporosa livianía, un extraño sopor, perdiendo casi el contacto con el suelo.
Pude escapar inciando unos movimintos coreiformes al ritmo del tarareo de una canción del verano, y continuar mi vida terrestre para traerles este fascinante documento).
Pude escapar inciando unos movimintos coreiformes al ritmo del tarareo de una canción del verano, y continuar mi vida terrestre para traerles este fascinante documento).
Visto en el patio de un claustro de Sangüesa.
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