domingo, 25 de mayo de 2008

Frikismo, el fin del Postmodernismo.

¿Qué referentes compartirán con más probabilidad dos internautas dados de cualquier punto del planeta?

¿La toma de la Bastilla?

¿El festival de Woodstock?

¿A Yuri Alekséievich Gagarin?

¿El mayo del 68?

Seguramente, antes a Newton, Darwin, Einstein o Asimov.

Pero por encima de todos... ¡a Dark Vader!


“El 25 de mayo de 1977 la obra cinematográfica Star Wars, marcaba el embrión del fin del postmodernismo (que podemos iniciar en el 1973, con el Acuerdo de Paz de Paris, con la soberanía de los Vietnames). En ese preciso momento, el Modernismo que boqueaba como una carpa fuera del agua en forma de postmodernismo, empezó a extinguirse.”


¿Es eso lo que enseñaran los libros de texto de la era galáctica? Que el postmodernismo, después que el modernismo, en su esperanza de mejora de lo natural, decayera tras la vergüenza atómica y buscara desesperado, una humanidad libre contra las cuerdas del sexo indiscriminado (vulgarmente: amor libre) y toda suerte de neurotóxicos (vulgarmente: drogas).

El "noble" modernismo ya monstruoso, se arrastró en forma de un relativismo afectado que se excusa a si mismo (que no ha merecido ni nombre propio). Para caer en el ridículo final. En la mejora de la muerte, que dicen las viejas, se ve el más serio y respetable de los postmodernismos, en el que tiene la seriedad de no tomarse en serio. El que vuelve a razonar.

Tal vez ya no hay grandes dictadores encarnados en occidente o los que hay trabajan en una oficina. O tal vez... El único dictador que nos queda, nos mira a través de los ojos luminosos del Zorro del Siglo Vigésimo.

martes, 13 de mayo de 2008

El perro de Habacuc.

Habacuc.

Por ese hombre de profeta menor se conoce al artista costarricense, Guillermo Vargas [1]

En agosto del pasado año presentó su primera exposición en la Galería Códice. La obra consistía en la exposición del texto “Eres lo que lees”, escrito con pienso para perros en una pared y un perro de aspecto esquelético capturado en la calle. El autor manifestó la intención de dejarlo morir de inanición. [2]

Llamó al perro con el mismo nombre que Natividad Chandal, una muchacha de 24 años que murió despedazada por dos “Rottweiler” en Costa Rica, en noviembre del 2005.

La galería defiende [3] que al final el perro se escapó y sólo permaneció en la sala de exposiciones tres horas.

Pese al revuelo que ha provocado tan cruel exposición, el artista expuso en la siguiente Bienal Centroamericana ganando una mención con sus obras “Jonny leyendo y explicando” y “Pancartas” según Diario Nación [4]

Parece, desde la ventana del monitor, que actualmente existe en Internet un amplio movimiento de boicot [5], con poco éxito aparente, a la participación de “Habacuc”.

Ahora, como nota personal, diría que el caso me sorprende. Sorprende que las amenazas de un artista excéntrico sobre dejar morir a un perro vagabundo, medio muerto ya de hambre, levante tanto revuelo (digo ésto por la violencia verbal hacia él de los participantes en foros y bitácoras de Internet), mientras que continúan ciegos hacia la tortura y muerte reales.

Creo que estamos desensibilizados hacia la violencia y crueldad real y cotidiana, mientras que nos rasgamos las vestiduras ante noticias escabrosas. Creo que “El perro de Habacuc” rezuma estupidez humana, tanto del autor como de sus pueriles boicoteadotes.

Notas:

[1] http://transitiomx.net/edicion2007/artistas/habacuc
[2] http://elperritovive.blogspot.com/
[3] http://soydondenopienso.wordpress.com/2007/10/27/guillermo-vargas-habacuc-declaraciones-de-la-galeria-codice/
[4] http://www.nacion.com/ln_ee/2007/septiembre/14/aldea1239344.html
[5] http://www.nacion.com/ln_ee/2007/octubre/28/aldea1294331.html