domingo, 16 de julio de 2006

El lado oscuro y las 4 nobles verdades.

¿Por qué Ankin Skywalker se transformó en el siniestro, a la par que poderoso, Dark Vader? Bien, según el episodio III de la Stars Wars, Anakin temía la muerte de su esposa Padme, y busco un gran poder (Antes de reíros de este post, pensad que un guión para una película que vale millones de dólares no esta hecho a la ligera. Los guionistas de la misma, de seguro han de ser eruditos en filosofía oriental).

Acudió a pedir consejo al sabio Yoda. Que cual Buda, le dijo que un Jedi no había de tener apego a nada. Todo se pierde algún día, le dijo. El obstinarse en poseer, sólo acarrea; dolor, miedo e ira. Esta una de las sendas más directas al reverso tenebroso de la fuerza.

Anakin, al final, poseído por sus temores, sucumbió al mal. Y irónicamente, eso mismo fue lo que terminó con la vida de su amada y lo condenó a una amarga existencia como un Lord Sith.

Anakin sólo buscaba poder, un poder rápido, que ni siquiera era para él mismo, que sólo el engaño, la trama, la violencia y toda suerte de maldades pueden conseguir (los “buenos” que se transforman en malvados suelen ser los más terribles). El lado oscuro, no solo utiliza la propia fuerza, precisamente su poder reside en que juega con los temores y errores del contrario. Por eso, al principio es tan poderoso. Los jedis en cambio utilizan su propia fuerza. Podriamos decir que son “asertivos”, mientras que los Sith, son agresivos y encima con mala idea.

Buda ya hablo de esto hace miles de años. En sus 4 nobles verdades. Que resumidas vienen a decir que todo es dolor - Incluso, lo bueno que nos causa felicidad se perderá y nos causará mayor dolor -. El camino propuesto por él es el del des-apego. No desear, pero tampoco esforzarse en no-desear. Nada esta prohibido, nada esta permitido. Únicamente se advierte que el deseo produce los 5 venenos: odio, apego, ignorancia, orgullo y envidia.

Precisamente el más inocente de estos venenos, el apego. Fue el que llevo a Dark Vader a ser lo que fue y por si no fuera poco, ese mismo apego fue el causante de hacerle perder lo que más quería.

Tanto en la fantasía, como en la vida real. Al final, nuestro único enemigo somos nosotros mismos. Es contra nosotros que hemos de contender. Y como dijo “no se que gran hombre”: El que vence a los demás es fuerte. Quien se vence a si mismo es poderoso.

En este enlace encontrareis algo sobre las enseñanzas de Buda (o de Yoda)
http://es.wikipedia.org/wiki/Cuatro_Nobles_Verdades

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